Porque claro, tú le dices a alguien que olvide y ya está. “Olvida”, te dice el profesor de la vida. Ese que suelta alegremente semejante sabioconsejo, pocas situaciones ha tenido que olvidar en su vida. O sí, pero es más fácil así. ¿No comes? Come. ¿Estás triste? Sonríe. ¿Recuerdas? Olvida.
La cuestión es que cualquier hijo de vecino que ha pasado por eso sabe que basta querer olvidar para recordar CADA SEGUNDO lo que queremos olvidar. Y tú lo sabes. Qué más quisieras tú que poder olvidar. Como si a ti te gustara sufrir. Sabes que eso no es tan fácil como te lo pinta el maestro de vida, pero como en teoría el del sabioconsejo es un experto, lo escuchas. “Olvida lo que te hace sufrir, lo que resta en tu vida. Ilusiónate”. Blablabla. Jajaja.
Y tú sin poder hacerlo. Tontorrón. Eres incapaz de seguir el chorraconsejo. No puedes olvidar. Todo el día recordando que debes olvidar. Cada segundo en tu cabeza. Nunca habías recordado tanto lo que quieres olvidar. No puedes olvidar lo que duele. NO DEBES olvidar.
La simpleza de hacernos creer que lo que debemos hacer es olvidar, como si fuera un simple acto de voluntad. No hay que olvidar, hay que superar. Y superar implica enfrentarse a lo que duele, aceptarlo, llorarlo y curarlo. A ti te da igual olvidar o no, tú lo que quieres es no sufrir. Sabes que olvidar nunca se olvida. No olvidarás, simplemente llegará el día en que serás capaz de recordar sin sufrir. Y para eso, como para todo lo demás, no hay pócima mágica, ni truco ni magia. Hay PSICOLOGÍA.
-Olvida.
-Te olvido.
Maravillosa reflexión.
Quizás existan personas a las que les cueste muy poco olvidar (ya me lo espero todo), y por ello no comprenden que las emociones no son tan fáciles de controlar.
Ha sido muy motivador leerte. Un saludo
Seguramente será eso: que a algunos les cuesta poco o que queda guay demostrar que se olvida rápido, aunque sea un postureo más. Muchas gracias por tus palabras. Un saludo
Postureo… Qué gran palabra, y cuánto dice con tan poco Jajaja. Saludos y feliz fin de semana.