Sí, pero…el túnel de la manipulación.

junio 20, 2021

No todo narcisista es fácilmente reconocible, hay conducta narcisista encubierta, conducta con apariencia de humildad, inocencia. generosidad y empatía. Cuando la vida nos pone ante una persona así aumenta nuestro riesgo de sufrir porque ninguno de nuestros mecanismos cognitivos diseñados para ponernos en alerta se pondrá en marcha. Si no detectamos peligro no haremos nada. Personas que se nos muestran agradables, encantadoras, quieren ayudarnos y lo hacen mientras tejen la red de ese narcisismo que no vemos. Ni siquiera se dan cuenta, por eso es imposible que cambien.

Cuando detectamos egocentrismo en el otro nos ponemos en alerta. El problema en las relaciones personales surge cuando el patrón de comportamiento que nos da el otro va variando. Ante alguien que siempre muestre agresividad aprenderemos a responder a ese patrón. Sin embargo, el despiste, el refuerzo intermitente, el ‘ahora te doy y ahora te quito’, el no saber de qué humor se va a levantar la otra persona esconde muchas veces una personalidad narcisista fácilmente confundible con otros rasgos de personalidad y que, desde esa no conciencia de la situación, va extendiendo la red de la manipulación. Sin darnos cuenta, sin que se dé cuenta, los vínculos de la relación serán ambivalentes e inestables: un día cariñosa y complaciente, al siguiente, distante y fría. Personas que actúan en función de cómo se encuentran y que pueden enfadarse terriblemente hoy por algo que el día anterior no se enfadaron. No poder predecir lo que va a pasar con estas personas daña profundamente porque no se puede buscar un patrón que explique la conducta relacional. Lo cierto es que a estas personas las hemos visto bastante enfadadas en alguna ocasión, tantas como dulces y encantadoras en otras tantas. ‘Tiene carácter’, pero se preocupa por mí. Un clásico.

Bajo esta inestabilidad se esconde una sensación de superioridad que es mucho más difícil de detectar y que, en muchas ocasiones, acabará convirtiendo a esa persona en la supuesta víctima de la situación. Esto es sutil, muy sutil y se puede dar en cualquier tipo de relación. Hay madres así, al igual que padres, hijos, jefas, amigos y parejas.

La conducta narcisista da para escribir y escribir. Teniendo el narcisismo diferentes formas de mostrarse hay características que sí comparten y ante las cuales deberíamos ponernos en alerta:

  1. Sentimiento de grandeza. La persona narcisista habla de sus logros con el objetivo de ser reconocida y alabada. Puede llegar a mentir en cuanto a los logros. Las redes son una gran plataforma para eso: es un clásico el narciso que tiene varias cuentas tras las cuales únicamente está él fingiendo actividad exitosa. Su auténtica necesidad de admiración convierte el reconocimiento en el único objetivo. El objetivo no es el logro de la tarea. Si la tarea es exitosa pero no recibe admiración se sentirá hundida; de ahí, que finjan éxito aunque no lo tengan: el foco en el reconocimiento.
  2. Se cree única y especial. Creerte único sin darte cuenta de que eres del montón (como la mayoría de los mortales) impide mantener vínculos estables en el tiempo. La persona con este sentimiento latente de ‘elegida’ tiene una actitud de desprecio a los demás, aunque no se dé ni cuenta, aunque nadie se dé cuenta. Cuando rompen relaciones su argumento suele ser que ‘no todos están preparados para estar/trabajar conmigo’. Creer que nadie está a tu altura es una actitud de desprecio a los demás. Una actitud que les sitúa a mucha distancia de entender que las personas le ven el plumero y se alejan en cuanto pueden. Personas que tampoco perderán el tiempo intentando explicarle algo porque no hay nada que pueda entender. ‘A mí nadie me discute, son ellos los que descubren que no están a la altura y se alejan’. Porque claro, darte cuenta de que no van a perder el tiempo hablando con quien no entiende no es posible.
  3. Explota las relaciones con los demás. De manera muy sutil: se acerca, utiliza y se deshace cuando esa relación ya ha cumplido su función (suele ser cuando el otro se da cuenta del personaje que tiene delante y huye). Insistirá en que todas las personas del camino te enseñan algo, todas te acercan a tu verdadero propósito. Será incapaz de reconocer que tiene un problema en las relaciones sociales porque las concibe desde su ombligo, desde su necesidad personal o profesional del momento. Si tus relaciones no cuajan, si en tu equipo hay mucha rotación, ¿dónde está el problema? Fácil de ver y aceptar fuera de la conducta narcisista. Imposible dentro del patrón de vida narcisista.
  4. Soñar con su vida le lleva a confundir retos ambiciosos pero alcanzables con fantasías e incluso delirios de poder, grandeza, conocimiento o belleza sin ningún ajuste a la realidad. Esto le lleva a instalarse en un mundo paralelo en el que monta el campamento y vive ajeno a la posibilidad de darse cuenta de algo de lo que le está pasando. Hablar con esa persona es literalmente hablar con la pared.
  5. Se cree envidiada. Fruto de vivir instalada en todo lo anterior creerá que los demás la envidian, lo que genera un sentimiento de arrogancia y superioridad que no hace más que retroalimentar su posición en la realidad paralela.

No son conscientes de nada de todo lo anterior. Desde ahí salen al mundo asumiendo los roles de su vida presente: empleados, jefes, padres, madres, abuelas, hijos, parejas… Desde ahí ven el mundo y salen a vivir la vida con un repertorio de técnicas de manipulación.

Como lo de las técnicas da para un manual entero hoy me voy a referir a la visión de túnel. Es una estrategia que utiliza la persona narcisista para poner la atención en un detalle sin importancia para minimizar lo que la otra persona ha conseguido. También lo utilizan para librarse de su responsabilidad. Esto les lleva a que cuando alguien los confronta en un engaño o mentira su primera reacción es vanagloriarse del tiempo que han sido capaces de mantener esa mentira y no en la traición en sí. A la que doy la vuelta y pongo el foco en mi habilidad para mentir ya descargo en ti la responsabilidad de no haberte dado cuenta. Vuelta a la tortilla. Así todo el rato.

Esta es un arma potente y cotidiana de manipulación. Si acabas de tener un éxito en el trabajo el narcisista te felicitará, pero pasará rápidamente a recordar algo en lo que no tienes éxito. No lo hacen con cara de ogro pero en el ‘¡qué bien!, enhorabuena, pero…’ se abre la posibilidad de caer al abismo del auténtico vacío. Lo hacen aparentemente animándote a seguir superándote, a que sigas consiguiendo cosas. Es probable que tú lo interpretes como que te inspira, impulsa, te ayuda y motiva, pero lo que hace es pasar de puntillas y todo lo rápido que puede por tu logro y llevar tu atención a lo que aún no has logrado. Lo que hace la persona narcisista e insegura es restringir tu campo atencional para que te fijes solo en lo que ella resalta.

De manera muy sutil te llevará poco a poco a la insatisfacción y a creerte incapaz teniendo la capacidad objetiva de lograr grandes cosas. Convenciéndote de todo lo que aún eres capaz de hacer tirará por tierra todo lo que has conseguido. En un momento, todo lo conseguido ya no vale nada. Eres capaz de mucho más. El foco en lo que todavía no. Intuiréis que aquí está la clave del enganche a las técnicas de crecimiento personal.

Te instala en un túnel con luz al fondo, pero que a medida que te acercas al final la luz se va alejando. Un clásico lo de mirar al horizonte. El paso siguiente podéis imaginar cuál es (afortunadamente vamos avanzando): repetirte que vives insatisfecha, que no sabes valorar nada, que tienes que ser más agradecido, creer más en ti y que te tienes que querer más porque si no te quieres NADIE te querrá (joya de la corona de la manipulación). Y de nada sirve el discurso de la moda del autoamor si no analizas todo lo que hay debajo de esta insatisfacción vital. De nada sirve porque lo que te lleva a creer que necesitas el discurso del autoamor es la misma necesidad de agarrarte al discurso negocio del autoamor.

Este patrón relacional mantenido en el tiempo hará que la víctima de esta relación sea incapaz de detenerse en lo que hace bien. Muchas personas son incapaces de decir qué hacen bien y cuando analizas compruebas que han estado rodeadas de personas que han conducido su atención a la tarea pendiente, al no logro, a la no perfección en todo. Esto genera ansiedad y estrés. Esto suele estar en el origen de mucha de la autoexigencia sin sentido. Cuanto más estrés y ansiedad más visión de túnel. Se minimizan cada vez más los logros y te sentirás mal porque solo serás capaz de ver lo que falta por lograr.

Esto es difícil cuando la relación se da en la familia porque, lamentablemente, mucho de esto se da en la familia. Aprender a poner distancia emocional (no siempre es posible la física) y aprender a hablar menos (para el narcisista manipulador es clave lo de todo lo que digas podrá ser utilizado en tu contra). Ojo con la moda de mostrarnos vulnerables con todos, al manipulador lo alimentamos mientras vamos contando dónde está nuestra debilidad. Mucho manipulador hace alarde de la importancia de reconocernos vulnerables: la red, el cebo. La trampa. Un adiós a tiempo, por favor.

¿Qué hacer?

  1. Detectar dónde quiere llevar tu atención. Ante la duda pedir ayuda profesional porque seguro que dudaremos. Conseguir que dudemos es su arma, porque ese hueco de la duda es el lugar por el que la persona narcisista se mete en nuestra vida.

2. Forzarte a reconocer lo que has logrado y el esfuerzo que has invertido en ello.

3. No escuchar, cortar esa conversación, diga lo que diga esa persona, sea quien sea. De lo contrario acabarás sintiéndote culpable por lo que no has hecho. Pedir ayuda si no te ves capaz de hacerlo.

4. Decirle que tú sí estás orgullosa de lo que has logrado, mientras te vas yendo de esa conversación. Cortar (una vez más, las veces que haga falta) esa conversación. El mejor momento para cortar esta conversación ( y tu relación con esa persona) siempre es YA.

5. No discutir con esa persona, solo hacerle ver que su opinión no te afecta ni influye. Total seguirá pensando que no estás a la altura.

Cuando el narcisista se da cuenta de que no tiene hueco en tu autoestima dejará de molestarte. Lamentablemente, buscará a otra persona a la que sí pueda dominar emocionalmente porque no sabe comportarse de otra manera.

Entradas relacionadas

También en el desierto.

También en el desierto.

He llorado de emoción muchas veces en medio de un mar, alejada de la costa. La emoción de llorar de felicidad sintiéndome parte minúscula de algo tan inmenso no la había experimentado con nada más. He acabado el año descubriendo que la inmensidad del desierto me...

Cuántos cuentos te cuentas.

Cuántos cuentos te cuentas.

Esta semana ha muerto Kirstie Alley. Tenía 71 años. Es curioso como estas personas que se han metido en nuestras vidas viven (y mueren) ajenas a su edad cronológica. Kirstie es, entre otras, esa Rebecca de Cheers, esa serie en la que se suceden escenas en un bar de...

8 Comentarios

  1. David

    Miles y miles de gracias. En encontrado respuestas al fin.

    Responder
    • Mjgcaimari

      Muchas gracias, David. Me alegro de que te haya servido. Un abrazo.

      Responder
  2. María

    Acabo de descubrir, quizá, algo importante gracias a tu texto. Nunca me había parado a pensarlo, pero me temo que mi pareja es un poco así. Él tan feliz en su mundo yupi y yo hundida en la miseria de no llegar nunca a nada porque siempre le pone un pero a todo lo que hago, aunque sea algo bien hecho… El caso es que es un buen tipo, pero sieeempre con el «pero» en la boca.

    Gracias, María Jesús. Ahora a ver qué puedo ir haciendo…

    Responder
    • Mjgcaimari

      Hola, María, me alegro de haberte ayudado a reflexionar aunque entiendo que la situación no es agradable. No está bien sentirte hundida en la miseria, no está bien sentirte pequeñita, no lo permitas, por favor. No sé cuánto tiempo llevas sintiéndote así pero quizá es un buen momento para pararte a ver cómo recuperas esa autoestima tan lastimada. Se sale de ahí. Hay que volver a recomponer el puzle pero se sale. No dudes en pedir ayuda si no puedes gestionarlo tú sola. Y ojo con lo de ‘es un buen tipo, pero…’

      Muchas gracias por comentar. Un abrazo.

      Responder
  3. Cristina

    Como persona que ha tenido la desgracia de toparse en la vida con uno de estos individuos te doy mil gracias. No te imaginas lo gratificante que fue el descubrir lo que es realmente un narcisista y por fin encontrar respuestas a todas las situaciones a las que no encontraba sentido y que creía que eran solo imaginaciones mías ( son expertos en hacerte creer eso, ahora lo sé). Gaslighting, refuerzo intermitente, breadcrumbing, future faking, love bombing… con cada cosa que aprendía me iba liberando de su influencia. Te animo a que sigas escribiendo sobre este tema porque muy pocas personas lo conocen y el sufrimiento de las víctimas es muy grande.

    Un abrazo y gracias!

    Responder
    • Mjgcaimari

      Hola, Cristina, seguimos necesitando información y formación sobre las relaciones y las formas funcionales de relacionarnos. Siento mucho que tuvieras que pasar por esa situación porque a diario veo el sufrimiento y la muerte en vida que eso significa. Me alegro de que pudieras salir de ahí y recompusieras todo lo que esa persona había dañado. Muchas gracias por tu comentario. Comprobar que es necesario anima a sacar tiempo para escribir. Un abrazo.

      Responder
  4. Francisco

    Conocí una persona así en un momento en el que estaba en una posición muy vulnerable y obvie su comportamiento durante muchos años, en parte por que no entendía que ocurría.

    Ojala hubiera leído un articulo como este hace años, muchas gracias.

    Responder
    • Mjgcaimari

      Lamentablemente estas personas siempre van a la caza de personas vulnerables. Por suerte pudiste obviar su comportamiento. Muchas gracias por el comentario. Un saludo.

      Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *