Saben que no soy suya.

Saben que no soy suya.

Yo no quiero que mis hijos piensen como yo. No quiero que sean como yo. Me sorprenden quienes se enorgullecen de que sus hijos tengan los mismos gustos que ellos, se dediquen a lo mismo, piensen igual o vean el mundo de la misma manera. Me sorprendo muchas veces...